miércoles, 26 de diciembre de 2018

REYNALDO NICHELE "El violín de mi ciudad", está en un CD editado por "Acqua Records en 1997; grabación original de 1975. Este cuarteto de Nichele, integrado por él en violín, Eduardo Rovira (bandoneón y arreglos), Oscar Mendy (piano) y Néstor Mendy (contrabajo) interpretaba ocho de los temas del CD de referencia, titulado "Que lo paren"; en donde están, también, los siete temas restantes( del 1 al 7) del LP que comenté anteriormente. Tengo, asimismo, el CD, pero separé este registro; porque si bien ambos arreglos son de Rovira, en el cuarteto liderado por Nichele, son más formales y aquí van (temas del 8 al 15):
*8) "El violín de mi ciudad" (E. Rovira) -4:46-  *9) "Margarita Gauthier" (J. J. Nelson-J. Mora) -3:50-  *10) "El motivo" (J. C. Cobián-E. Cadícamo) -3:51-  *11) "Temblando" (A. Acuña-Charrúa) -3:07-  *12) "Mi noche triste" (S. Castriota-P. Contursi) -4:44-  *13) "Re Fa Si" (E. Delfino) -4:34-  *14) "Don Juan" (E. Ponzio) -4:10-  *15) "La cumparsita" (G. M. Rodríguez-P. Contursi-E. Maroni) -4:15-
Evidentemente, Nichele eligió los temas y sugirió a Rovira unos arreglos no tan de vanguardia. A mí, me gustaron mucho: "El violín de mi ciudad" (composición de Rovira), "Margarita Gauthier" (bella melodía de Joaquín Mora), "El motivo" (exaltó a Cobián, sin duda), "Re Fa Si" y "Don Juan" (con un magnífico arreglo, muy canyengue a lo Alfredo Gobbi). Los tres restantes, no desmerecen al compacto. También muy bueno el folleto que lo acompaña, con la discografía de Rovira, desde 1957 a 1975 y comentarios de Miguel Praino, Gustavo Beytelman y el Tata Cedrón; igualmente de Diego Zapico y Pablo Voitzuk. 
Reynaldo Nichele (1918-1998) -Buenos Aires (Argentina), estuvo veinte años en la orquesta de Troilo, otros veinte en la Sinfónica Nacional, en varios cuartetos con Rovira, Atilio Stampone, Fernando Romano; además con Osvaldo Requena, Carlos García y Néstor Marconi. Había estudiado violín con Carlos Giucci y fue uno de los grandes, en ese instrumento, que dio el tango.
J. C. Conde Sauné         

lunes, 17 de diciembre de 2018

Cada primavera trae golondrinas y gorjeos de pájaros diversos; pero no obstante, sentimos el invierno cerca y distantes los años transcurridos.
J. C. Conde Sauné

sábado, 8 de diciembre de 2018

Estaba limpiando y ordenando un poco mi biblioteca y encontré el libro "Kafka", de la ensayista francesa MARTHE ROBERT (1914-1996). Arreglé varias hojas que se habían despegado y releí algunas páginas. La primera lectura fue hace bastantes años, quizás 30 ó 40. Lo dejé a mano, en cualquier momento lo vuelvo a leer y lo comento. Es un libro importante y un muy buen análisis, de la obra del gran escritor checo.
De más está decir, que es una de mis preferencias en la narrativa literaria y uno de los que ha permanecido, en el paso del tiempo. Él no descubrió lo absurdo, pero lo hizo prevalecer en la condición humana.
Cuando hacía mis tareas contables, en una de las oficinas que trabajaba, había una compañera que las compartía conmigo, en Contaduría. Ella estudiaba Derecho en la Facultad. Una vez, conversando con ella, le dije que me parecía extraño que no lo hiciera en una oficina de abogados. Me contestó, que nuestro trabajo le gustaba y que, más adelante, la ayudaría a descubrir las trampas en las auditorías contables. Creo que ella no leía ficción, nunca la oí hablar de algún libro; pero le dije, medio en broma, que siguiera estudiando en la Facultad y consiguiera el título. Pero si quería saber lo que era la justicia y comprenderla, sería mejor que leyera "El proceso" (novela) y "Ante la ley" (cuento). ambos de Franz Kafka. Sonrió y me contestó: lo voy a tener en cuenta, de vez en cuando (ella sabía que yo escribía) hay que hacerles caso a los poetas, son medios chiflados, pero a veces dicen la verdad.
J. C. Conde Sauné  

sábado, 1 de diciembre de 2018

FIGURAS Y MÁSCARAS SEGÚN PAUL KLEE

TEATRO DE MARIONETAS
¿Salimos a jugar?
La muñeca tumbada en el suelo.
El perro camina hacia afuera,
no quiere participar.
Una ventana y un sol,
grande como mamá-casa,
como mamá-muñeca.
¿Y la ventana, el sol y la
flor, abarcan el panorama
de mamá-casa-mamá-muñeca?
No importa si el sol se esconde
y la ventana se cierra.
Hay un sol y una ventana,
si quieren imaginarla.
¿Salimos a jugar?
J. C. Conde Sauné