viernes, 27 de febrero de 2015

Cuando estudiaba el "arte de escribir", en el Instituto de Lenguas y Culturas, en el último año, Raúl Burzaco que era uno de nuestros profesores recomendó a sus alumnos, de acuerdo a sus estilos narrativos, algunos autores contemporáneos para que los lean. Sabía, sin duda, que uno empieza leyendo a los clásicos; no sé si eso pasa ahora, pero antes era así. A mí, entre los que recuerdo de la lista, estaban: Ernest Hemingway, William Faulkner, Roberto Arlt, Ernesto Sábato, Albert Camus, Erskine Caldwell, Jean-Paul Sartre, Catherine Mansfield, Mario Vargas Llosa y David Viñas.
Hoy cuando miro mi biblioteca, a pesar de haber leído a todos los recomendados, encontré la mitad de ellos; quiere decir que canjeé o regalé los otros libros. Perduran: Faulkner, Camus, Caldwell, Arlt y Catherine Mansfield. Y, curiosamente, me interesan otros escritores contemporáneos contrapuestos a mi estilo: Borges, Bioy Casares, Cortázar, Felisberto Hernández, Silvina Ocampo, Dino Buzzati, Kafka y Angel Bonomini; por citar a los que veo en mi biblioteca. 
No critico a Burzaco, ya fallecido, siento que el amor por la literatura es muy variable. No siempre se está conforme, con lo que uno lee o escribe. Cada cual idea su canon particular; pero nunca deja de ser importante, una guía que ayude a conocer y valorar una obra literaria. Para mí fue valioso leer a Faulkner, Camus, Caldwell y Mansfield, por primera vez; a Roberto Arlt ya lo conocía, era como un viejo amigo.
J. C. Conde Sauné   

martes, 24 de febrero de 2015

Entre los cantantes que tuvo Osvaldo Fresedo, una de mis orquestas preferidas, siempre me gustaba escuchar a Roberto Ray; tenía un LP y pasó a mejor vida de tantas pasadas. Estuve buscando en "You Tube" y escuché algunos temas interpretados por ellos. También de otros cantantes, muy buenos, que tuvo Fresedo como Oscar Serpa y Ricardo Ruiz. Pero en el ínterin, me acordé de Héctor Pacheco y de un tema que escuché una vez y me atrapó: "Lluvia sobre el mar". Lo busqué allí mismo y lo encontré; tiene letra de José María Contursi, pero ignoraba que su música fuera de Armando Pontier. Lo volví a escuchar y es un registro notable, muy bien cantado por Héctor Pacheco y un arreglo orquestal fabuloso. Antes de comenzar el cantor, hay un doble remate orquestal, de la coda, magnífico. Y seguí escuchando a Fresedo-Pacheco. Para muchos que piensan que el tango hay que cantarlo a grito pelado, impostando la voz sin armonía y exagerando los fraseos, les pueden parecer muy refinados estos registros. Pero apuesto a los amantes del buen tango y menciono lo que escuché y disfruté de ese binomio: "Lluvia sobre el mar", "Fugitiva" (composición hermosa de Juan Carlos Lamadrid y Astor Piazzolla, muy poco cantado igual que el tema anterior), "Perdóname", "Discepolín" (el tema de Homero Manzi y Aníbal Troilo, cantado de manera sorprendente), "Vida mía", "Cuando cuentes la historia de tu vida", "N. P.", "Muñequita de París", "Nostalgias", "Daño", "Solo de bandoneón", "Viejo malevo", "Silbando", "Y total para qué", "Y no te voy a llorar", "Sosteniendo recuerdos", "Ninguna", "Mi adorable desconocida", "Algún día volverás" y "Pampero".
Son veinte interpretaciones antológicas, lástima que estén en distintos videos. Pero valen la pena buscarlos.
J. C. Conde Sauné  

viernes, 20 de febrero de 2015

La marcha del 18F no fue, como piensan en las esferas del gobierno, algo que se pueda vincular a la oposición o al poder de los fiscales, que fueron quienes la convocaron. Es una marcha por la indefensión en la que vive la ciudadanía. Una parte de ella ha tomado conciencia, que se avanza hacia un dogmatismo ideológico, en donde no estar de acuerdo con lo que narra el oficialismo, es ser golpista o desestabilizador. Cuando lo que se quiere, es que se respeten las ideas no concordantes. Yo no pensaba escribir sobre esto, porque no fui a la marcha; aunque la entiendo y la respeto.
La muerte del fiscal Nisman, es una de las tantas, acaecidas en el país, en circunstancias dudosas y otras que nunca fueron esclarecidas. ¿Adónde está la falla? Las respuestas las tendrían que dar los gobiernos, éste y los anteriores. Respecto al acontecimiento, tres hechos me llamaron la atención, cuando ese día salíamos del edificio para hacer unos mandados, una vecina con la que siempre cambiamos sólo un saludo, nos confesó que se iba a la iglesia a rezar y de allí se iba a la convocatoria; nos dijo que llevaba un paraguas por las dudas. Después ya en el acto mismo, que vimos en el noticiero, un padre con su hija adolescente, manifestó que estaba allí para tratar de mejorar el país que le dejaba a su chica. Y otro muchacho de veinte y pico de años, expresó que había ido porque quería ver si, entre todos, se podía mejorar un poco lo que estaba sucediendo; sí aunque sea un poco, volvió a repetir. Y no era gente adinerada, eran personas de trabajo que son las que todavía sostienen al país y otras, de más edad, que también lo dieron todo en sus años de labor. ¿El poder se habrá dado cuenta de tal cosa?
Así estamos, personalmente, cada día me siento más escéptico de que ocurra algún cambio para bien; ojalá me equivoque, lo digo con total franqueza.
J. C. Conde Sauné 

martes, 17 de febrero de 2015

SEMÁNTICA TRASNOCHADA

argüir a la distancia
acumular palabras
sólo eso
y después
sentir que no se ha dicho
gran cosa
con las sibilinas palabras
acumuladas sin ganas
sin fuerza
para huir de su cerco sintáctico figurado
al que algunos llaman
estilo amanuense o a la carta.
J. C. Conde Sauné       

miércoles, 11 de febrero de 2015

Entre los CD de Miles Davis que tengo, quizás el que voy a nombrar es uno de los que menos escucho. Pero igual quiero comentarlo porque de los seis temas, por lo menos tres son para destacar; aparte todo suma para la historia del jazz. Se trata: "The Musings of Miles", grabado en New Jersey en 1955 para "Prestige Records". Era un cuarteto de Miles Davis, integrado por él en trompeta, y una base rítmica de lujo: Red Garland (piano), Oscar Pettiford (bajo) y Philly Joe Jones (batería).
Éstos eran los temas: 1) "¿Will You Still Be Mine?" (Dennis-Adair) -6:20- Un solo discreto de Davis; Garland, Pettiford y Philly Joe Jones logran realzar un poco el tema. 2) "I See Your Face Before Me" (Dietz-Schwartz) -4:44- Tal vez a este tema se deba el título del CD, Davis lo ejecuta con un aire de ensueño o meditación; la trompeta con sordina y con un semitono bajo, casi como un suspiro. Garland no desentona, el bajo y la batería tampoco. La diferencia de Miles, con otros músicos, es su imprevisión; de maravillas como lo interpreta. 3) "I Didn't" (M. Davis) -6:02- Buen comienzo de Philly Joe Jones. Davis, se podría decir que bien pero muy formal. Hacia el final, muy buen solo de batería de Philly. 4) "A Gal en Calico" (Robin-Schwartz) -5:15- Miles otra vez con sordina y un solo destacado. Red Garland al pelo como siempre; también los otros dos. 5) "A Night in Tunisia" (D. Gillespie-Paparelli) -7:20- "Drums" y "bass", en el comienzo, creando una gran expectativa y la trompeta se viene con un solo muy bueno, como desafiando a Dizzy con unos amagues de sobreagudos. Garland y los demás muchachos no se quedan atrás. 6) "Green Haze" (M. Davis) -5:48- Un Garland "blusero" y muy inspirado, asimismo Davis. Aparece, por fin, Oscar Pettiford con un solo para sacarle el sombrero. Un cierre de lujo. 
A este compacto lo acompaña, un relevante comentario de Ira Gitler, el gran crítico de jazz, sobre la trayectoria de Miles Davis. En el mismo menciona, una entrevista que él le hizo a Miles y éste le confiesa sus actuales preferencias entre los trompetistas: Art Farmer, Clifford Brown y Kenny Dorham.
J. C. Conde Sauné  

lunes, 2 de febrero de 2015

Poema N° 53 ( Cuaderno IV ) * Los recuerdos

ternuras y siglos para darte
                                          tiene
en un día como éste
                               cuando
grita tu ausencia
                         envejecida
de tanto nombrarla
te esperaba un poco triste
                                        y agrietado
en la penumbra de un sueño
                                            que lo agitó
hasta perderse en eso
                                 del no-ser
importándole mucho
la miseria
de irse desgastando
en los días
                emputecidos
                                   de una oficina
busca tu presencia
para negar su cielo
de luz artificial.
J. C. Conde Sauné