miércoles, 13 de febrero de 2008


¡Memorables ensueños!
Destinos sesgados en un desgaire
de horas sin fin soñando.
Acaso, si acaso
dejando al borde esos sueños
confusos de un mal dormir;
no entretener al subconsciente
con esos sueños furtivos, con esas
álgidas horas en que nos
mantenemos quietos muy cerca
de la muerte, muy cerca
del abismo, en donde se confunden:
silencio y obstinación;
abstracción y mansedumbre.


J. C. Conde Sauné

No hay comentarios:

Publicar un comentario